Las visitas artísticas buscan estimular la capacidad de imaginación, de deseo y de disfrute de las personas que se encuentran hospitalizadas así como la de sus acompañantes; descomprimir las tensiones propias del hospital; y favorecer la integración entre las diferentes personas que habitan este espacio. Buscando así generar un nuevo concepto de convivencia en los centros de salud, en el que tanto los pacientes como los colaboradores del hospital entiendan la enfermedad como gran oportunidad para el crecimiento espiritual y la muerte como una transformación inevitable y necesaria.
Entre calabazas y zanahorias se abrieron paso, allí acurrucada encontraron su sonrisa y sus ojos de asombro. La música comenzó y uno de ellos se acercó. Un títere saltó de su bolsillo a su dedo y otro al de ella. Bailaron, volaron sin dejar de verse a los ojos. El último compás sonó y los títeres prometieron volverse a ver mientras iban a parar a cada bolsillo. Él se paró para irse y ella se apresuró a juntar unas hojitas verdes y tomates “Para que te hagas una rica ensalada” dijo y sus ojos fueron un mar de emoción.